Mi nombre es Mariana, soy de Buenos Aires, participo en el movimiento humanista hace tiempo y.. de Buenos Aires Argentina, no? Y bueno, voy a hablar de la Marcha, de la Marcha por la Paz y la Noviolencia y lo que significó para mi. En mi vida persona yo siempre desde muy chica necesité y veía que el mundo estaba muy mal, con mucha violencia, y cuando encontré a estos locos que estaban haciendo cosas para cambiar el mundo y para transformar y para crear y no destruir, me llenó de una inmensa alegría. Después con el correr de las actividades, a veces te desesperanzás porque sentís que no te salen, porque sentís que sos vos tu sólo con tu grupo de amigos y nadie más, son pocos, somos pocos. Pero con esto de la Marcha Mundial yo creo que, em, que se abrió una posibilidad de que se puede, de que lo que no creías que era posible, es posible. Entonces te encontrás con alguien que te dice que siempre existió la violencia, o que siempre el ser humano fue contradictorio en sí mismo, y nada… y decís bueno, también te decían que ‘¿Una Marcha Mundial? No, no puede ser! ¿pero están organizados? ¿Pero es que cómo lo van a hacer?’ Y todo el mundo dudaba. Y nosotros éramos como los locos, pero ahora no somos locos, somos los realistas porque se hizo! Entonces me llena de una esperanza inmensa, no por mi, porque yo ya lo creía, sino para la gente que no creía y que me parece les puede dar una gran alegría que puedan empezar a creer. Eso es lo que a mi, en líneas muy generales, me pasó con la Marcha, y con este Parque maravilloso que es Punta de Vacas, que es donde estamos ahora, de una conexión y una profundidad inmensa conmigo y con los demás, como si fuéramos lo mismo. Bueno, eso. Item Link